DISPLASIA DE CADERA EN PERROS SINTOMAS Y TRATAMIENTO
¿Qué es la displasia de cadera en perros?
Displasia significa literalmente «desarrollo anormal». ¿Por qué? Porque los cachorros no nacen con caderas «anormales», sino que estas se desarrollan anormalmente con el transcurrir del tiempo.
La displasia de cadera en perros o displasia coxofemoral es un problema relacionado con los huesos de la cadera del perro, que afecta sobre todo (aunque no exclusivamente) a las razas más grandes.
La displasia de cadera en perros es una malformación genética, es decir, una enfermedad hereditaria que se pasa de padres a hijos pero se ve agravada por factores ambientales que pueden desencadenar y agravar la displasia, tales como una mala alimentación y ejercitar a tu perro de modo incorrecto (por ejemplo sobre ejercitarlo o hacer ejercicios demasiado fuertes cuando aún es muy joven).
Lo más frecuente es que la displasia aparezca de cachorros o adultos jóvenes, pero usualmente los síntomas de displasia canina se notan ya entre los 3 y los 8 meses de vida del cachorro.
Para poder caminar, el hueso de nuestra pierna y le cadera encajan entre si y «coinciden» como un puzzle para poder hacer bien el juego de la articulación.
La displasia de cadera perros consiste en que la cabeza del fémur (hueso de la pata trasera) no encaja bien con la cavidad cotiloidea, que es el hueco de la cadera. Al no encajar bien ambos huesos, el perro va perdiendo movilidad, camina mal y le duele. Para poder caminar, el hueso de nuestra pierna y le cadera encajan entre si y «coinciden» como un puzzle para poder hacer bien el juego de la articulación. La displasia de cadera perros consiste en que la cabeza del fémur (hueso de la pata trasera) no encaja bien con la cavidad cotiloidea, que es el hueco de la cadera. Al no encajar bien ambos huesos, el perro va perdiendo movilidad, camina mal y le duele.
SINTOMAS : Para confirmar que tu perro padece displasia de cadera, debes acudir a tu veterinario y él te lo certificará mediante pruebas.
1. El síntoma más claro de displasia de cadera es que el perro va variando su postura, sobre todo al caminar y anda «raro», con un ligero balanceo.
2. El perro suele andar despacio.
3. Otro síntoma de displasia de cadera en perros es que hacen «saltos de conejo» con ambas patas traseras juntas.
4. El perro pasa bastante tiempo tumbado o en su cama descansando.
5. Acostarse o incorporarse con movimientos lentos también es síntoma de displasia de cadera en perros.
6. Al estar de pie normalmente sobre sus 4 patas, el perro mantiene las patas de atrás muy juntas. Hay grados (ver ilustración a continuación): • displasia de cadera leve • moderada • grave
Mi perro tiene displasia de cadera ¿vivirá una vida normal? Pues contrariamente a lo que se pueda pensar a priori, sí, muchos perros con displasia de cadera viven vidas perfectamente largas y felices.
Cada caso es diferente, por supuesto, pero hay muchos tipos y grados de displasia, por lo tanto, como dueños, no hay que «desmoronarse» inmediatamente, tras ser diagnosticado nuestro perro con esta condición.
Tratamiento: El tratamiento para la displasia de cadera canina que los veterinarios utilizan varía mucho de un caso a otro.
En los casos más leves, el tratamiento es prácticamente nulo. Tal vez antiinflamatorios para bajar la zona, y poco más.
Pero en los casos más graves, el veterinario puede decidir que una cirugía es necesaria para corregir o mejorar la deformación. Como decíamos, la cirujía no es lo más habitual y el tratamiento de la displasia canina normalmente se basa en: • Fármacos paliativos de la inflamación y del dolor • Correctores ortopédicos de la postura • Utilizar una silla de ruedas para perros, para no cargar tanto su cadera • Complementos alimenticios para perros que favorezcan las articulaciones (protectores del cartílago) para retrasar el avance de la osteoartritis (artrosis) que a menudo se produce a raíz de la displasia. Consulta con tu veterinario, quien puede recomendarte administrar suplementos para perros con displasia/artrosis como la glucosamina.
Además de esto, un perro con displasia de cadera se beneficia de hábitos de vida saludables como: • Ejercicio moderado diario, para mantener la masa muscular del perro. • Masajes en la zona afectada para reducir la tensión muscular. • Mantener un peso correcto, ya que la obesidad hace que las articulaciones sufran más al tener que soportar más peso corporal.
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